Desayuno que ofrece tanto tocino como yogur. Un personal muy amable al momento de la salida. 😊

Desayunos enormes con una comida deliciosa. Habitación lo suficientemente espaciosa y de buen tamaño que cuenta con facilidades para hacer café.

Las habitaciones tenían balcón, ¡ideal para tomar aire fresco! El personal era amable y atento, lo que hizo la estancia muy placentera. 😉

Todos los empleados eran amables y la comida era deliciosa.

El hotel Mamaison es pequeño y tranquilo, con una ubicación muy cercana a la estación de metro. Las habitaciones son grandes, limpias y con un buen cuarto de baño. El personal del hotel es atento y amable. La wifi es perfecta y la decoración es bonita y moderna.

Recomiendo este lugar insistentemente.

La habitación era súper moderna y tenía todo lo que necesitaba. Me encantó la ducha con masaje, la cama gigante y la tele con todos los canales. El aire acondicionado y el Wi-Fi gratis son un plus.

Quizás la única cosa que menos me gustó fue el minibar, pero eso es solo mi opinión.

Este lugar tiene un restaurante maravilloso con un excelente servicio, y una atmósfera muy tranquila.

En una zona residencial, rodeada de verdes embajadas, cerca de la plaza de los Héroes y del Parque a pocos pasos del metro con la posibilidad de desayunar en pequeñas cafeterías de la zona.

La cómoda habitación sencilla y elegante.

El colchón no es muy cómodo y la limpieza no es visible. Una botella de plástico debajo de la cama y una bolsa de plástico en el balcón que encontramos a nuestra llegada y se quedaron allí durante toda la estancia. Los precios del desayuno de 15 euros por persona por noche son un poco altos en comparación con los precios de los locales de Budapest.

La vista a la calle es agradable, la habitación es climatizada y lo suficientemente espaciosa. Encontrarás un balcón y una mini nevera. La ubicación es fantástica, a 10 minutos andando de Bagni Széchenyi. Y en las proximidades de la línea de metro, de una estación de metro y de los autobuses.

La ubicación del hotel era buena, cerca de Bagni Széchenyi. El personal del hotel era muy agradable.- Las habitaciones tenían un tamaño decente y eran lo suficientemente espaciosas.- La comida era deliciosa.- Las vistas eran agradables.- Los servicios ofrecidos fueron útiles.

La ubicación es fantástica, en una zona bonita y tranquila, cerca de las principales atracciones de esta ciudad. El hotel se encuentra en el barrio de las embajadas, junto a la avenida Andrassy, lo que nos permitió llegar al centro en solo unos minutos caminando. Además, el hotel cuenta con un servicio de transporte que facilita aún más los desplazamientos. Las instalaciones del hotel estaban impecables, la limpieza era excelente y el desayuno delicioso. Pero lo más destacado fue el personal, siempre amable y dispuesto a ayudar, especialmente Esteban, quien hablaba español y nos brindó una atención excepcional.

Nada. Todo fue perfecto en este hotel.

Excelente ubicación cerca de la estación de metro con la que llegas en 10 minutos al centro, zona residencial tranquila, personal de recepción muy amable

El desayuno podría mejorarse

La habitación es muy espaciosa y luminosa, con una cama cómoda y espaciosa. TV, minibar, todo está bien. El hotel, aunque no está en el centro, está bien comunicado con algunas paradas de metro. Tranquilo, agradable.

La limpieza podría haberse hecho mejor.

La habitación estaba bien decorada con una cama de matrimonio. Tenía una buena cantidad de facilidades, como una caja fuerte, un minibar, una plancha y tabla de planchar.La ubicación es excepcional, cerca de restaurantes, una parada de autobús y el aeropuerto.